I CHING

Así es que la juventud misma debe ser consciente de su carencia deexperiencia y debe buscar al profesor.

Sin esta modestia y este interés, no hay garantía que él tenga la receptividad necesaria, que debe expresarse en la aceptación respetuosa del profesor.

La respuesta de un profesor a un alumno, debe ser clara y definida como la esperada de un oráculo; debe ser aceptado eso como llave para la resolución de dudas y de una base para la decisión.

Si se insiste en preguntar tontamente, sirve para molestar solamente al profesor.

Él hace bien de no hacer caso del alumno, y quedarse en silencio. Apenas pues, el oráculo da una respuesta solamente y rechaza ser tentado por las preguntas que implican duda.

La perseverancia debe mantenerse para no dejarse dominar uno por el otro, y entonces el éxito verdadero es seguro.

Los consejos del hexagrama son para elprofesor así como alalumno.

Aquí la inmadurez se menciona mientras que se anuncia una etapa en que se aprende; porque después de todo, el contacto cercano con la experiencia contribuirá al conocimiento necesario para crecer.

LA IMAGEN

Un manantial mana hacia arriba al pie de la montaña: La imagen de la JUVENTUD.

Así el hombre superior fomenta su carácter con minuciosidad en todo lo que él haga.

Un manantial tiene éxito en fluir fuerte y así escapa del estancamiento llenandotodos los lugares huecos en su trayectoria.

De la misma manera el carácter es desarrollado por la minuciosidad que no salta nada pero, como el agua, llena gradual y constantemente todos los boquetes y asífluye hacia adelante.

La montaña es fuerte, consolidada, solamente el manantial que fluye de ella, funciona enbusca de la formación de su propio curso.

Esta manera, uno no corre el riesgo del estancamiento. La juventud posee inexperiencia y puede tomar por los caminos inadecuados que retardarán su evolución.

LAS LÍNEAS

Seis abajo:

Hacer que un tonto en desarrollo incentive a uno para aplicar disciplina.

Las cadenas deben ser quitadas.

Entrar acalorado de esta manera trae humillación.

La ley es el principio de la educación.

La juventud en su inexperiencia está inclinada al principio a tomar todo negligentemente y juguetónamente.

Debe serle demostrada la seriedad de la vida.

Poner frenos, causados por una disciplina terminante, es una buena cosa.

El que juega con la vida nunca asciende nada.

Sin embargo, la disciplina no debe degenerar entaladro.

El taladro continuo tiene un efecto de humillación y paraliza las energías de un hombre.

Este hexagrama nos recuerda la juventud y la locura de dos diversas maneras.

Sería contrario el hecho de que ciertos castigos fueran medios represivos ya que hay formas de instrucción que podrían ser molestas al tonto yasí acentuaría más su terquedad.

Más allá de tal metodología, un buen profesor debe encontrar la forma más conveniente de comunicarse con su alumno, porque lo que realmente importa es que el educador pueda traerle el conocimiento.

Nueve en segundo puesto:

Llevar a los tontos con paciencia trae buena fortuna.

Saber tomaruna mujer trae buena fortuna.

El hijo es capaz de tomar la carga de la casa.

Esta línea representan a un hombre que no tiene ninguna energía externa, pero quién tiene bastante fuerzamental para llevar su carga deresponsabilidad.

Él hace que la superioridad internale permita tolerar con paciencia los defectos de la locura humana.

La misma actitud se debe a las mujeres como el sexo más débil.

Uno debe entenderlas y darles el reconocimiento de la consideración .

Solamente esta combinación de la fuerza interna con la reserva externa permite a uno adquirir la responsabilidad de dirigir un cuerpo social más grande con éxito verdadero.

Aquí la referencia se hace al el esmero y la paciencia necesitada para llevar a buen término cualquier instrucción.

El método deeducación no debe ser precipitado ni violento, sino calmo y comprensible.

Al alumno se lo debe manejar con la misma cortesía que tratarían a una mujer.

De esta manera, el estudiante aprenderá las reglas, y asumirá sus deberes. Entonces lo calificarán para hacer frente a la vida y apoyar a su familia.

No hay que confiar en una doncella que ve un hombre de bronce y pierde el dominio de sí.

Nada es propicio. Un hombre débil, inexperto, luchando por levantarse, pierde fácilmente su propia individualidad cuando imita una personalidad fuerte de un status más alto. Él es como una muchacha que se lanza hacia un hombre fuerte.

Un acercamiento tan servil no debe ser animado, porque es malo para ambos: la juventud y el profesor.

Una muchachadebe a su dignidadla espera hasta que la cortejan

En ambos casos es indigno ofrecerse, y nada bueno viene de aceptar tal oferta.

Alguien que ocupa un lugar excepcional atraegente debido a la fantasía superficial de ser relacionado con alguien de gran alcance.

Esto es significado por la mujer que se acerca a un hombre por su posición o belleza (el hombre de broncepuede también ser traducido como hermoso, rico). Por esa razón ella no debe ser tomada como una esposa, es decir, no podría ser aceptada, porque una persona mentalmente superior tendría la sensación de lo que por lo cual ella se acerca no es auténtico.

Seis en el cuarto puesto:

La locura enredada trae el humillación.

Para la locura joven es la cosa más desesperada enredarse en ilusiones vacías.

Se aferra cuanto más obstinadamente en tales fantasías irreales, la humillación de la voluntad lo alcanza más ciertamente.

A menudo el profesor, cuando está enfrentado con tal locura enredada, no tiene ningún otro recurso que dejar al tonto por un tiempo, no ahorrándole la humillación que de ello resulta.

Ésto es con frecuencia el único medio de rescate.

Cuando la ignorancia es alimentada por la terquedad, el tonto llega a un callejón sin salida.

Seis en quinto lugar:

Locura infantil trae fortuna.

Si se ayuda a una persona inexperta que buscainstruccióninfantil, es trayectoria correcta, para el hombre desprovisto de arrogancia que se subordinó a su profesor ciertamente.

Nueve en el lugar superior:

El castigar la locura no conviene a uno cuando hay transgresiones. La única cosa que conviene es prevenir transgresiones.

Un tonto incorregible debe ser castigado a veces.

Los que no presten atención, lo tendrán que sentir.

Pero la pena no se debe imponer con cólera; debe ser restringida a guardar objetivos contra los excesos injustificados.

El castigo nunca es un extremo en sí mismo pero sirve simplemente para restaurar el orden.

Esto se aplica no solamente en vista de la educación, también en vista de las medidas tomadas por un gobierno contra un pueblo culpable de transgresiones.

Interferencia gubernamental debe siempre ser simplemente preventiva y debe tener como su puntería única el establecimiento de la seguridad y de la paz públicas.

El castigo excesivo puede incrementar la insentatez, pero la precaución preventiva será ventajosa para ambos lados.

Ésta es la razón por la que el profesor debe esperar para ser buscado en vez de ofrecerse.

Esta es la forma correcta de actuar, ocurriendo las cosas en su momento correcto, de la manera correcta

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