Más aún cuando se trata de personas

con un estilo de vida claramente marcado e influenciado

por la religiosidad.

Tal vez debas tratar de enfocar tu capacidad de razonar sobre las cuestiones espirituales, no para desbaratarlas, sino para lograr entender qué cosas son realmente las importantes en los mensajes que recibes, y así sobreponerse a las dificultades.

Los obstáculos que se te ponen delante del camino,

bloqueándote el paso, pueden ser tus propios principios.

Es que sin darse cuenta, o quizás sí,

uno puede llegar a comportarse de manera muy cerrada,

negando fanáticamente lo que no nos parece correcto o hallamos inmoral.

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